¿Cómo empacar una mochila?

Abarrotar tu mochila de cosas en forma descuidada es sólo ligeramente mejor que subirlas a la montaña en un carrito de compras. Una mochila cargada cuidadosamente es más cómoda, estable y eficiente y no estarás buscando a tientas por un impermeable cuando realmente lo necesitas. Aquí te diremos cómo:

> Afloja todas las correas de compresión para que el compartimiento principal se extienda completamente y cargue de manera uniforme. Después de cargar, ajusta las correas para prevenir que el contenido cambie de lugar.

> Organiza el equipo en sacos, uno para extra base layers, una para comida, otra para los kits de primeros auxilios y reparaciones. Usa los elementos suaves para acolchar a los duros que podrían pincharte en la espalda. Ejemplo: Mete tu cocineta entre sacos de ropa.

> Empaca el equipo más pesado en la mitad de la mochila y cerca de tu columna para estabilidad óptima y transferencia de carga. Piensa en ligero-pesado-ligero: Bolsa de dormir abajo, carpa y comida en la mitad, ropa en la parte superior.

> Mantén los elementos que vas a necesitar en el camino -mapa, brújula, chaqueta, bocadillos- en la capucha, bolsillo lateral, o encima de todo en el compartimiento principal. Coloca los elementos que necesitarás cuando te detenga, como el refrigerio o ropa extra, cerca de la parte superior de la mochila.

> Pon baterías, protector de labios, fósforos y otras cosas pequeñas en una bolsa para que puedas localizarlas rápidamente. Si hay un sujeta-llaves en el bolsillo de la capucha, engánchalo a la bolsa.

> Cuando estés subiendo una colina muy empinada o cuando estés caminando entre maleza o haciendo cross country en ski, reconfigura tu carga con los elementos más pesados en la base para bajar su centro de gravedad y mejorar la agilidad. Mete las correas y evita que cualquier cosa cuelgue en el exterior de la mochila que pueda engancharse en ramas.

> Coloca los elementos en el mismo lugar para cada viaje; automáticamente sabrás dónde encontrarlos.

Tip
1)Refrigerios