Eiger non stop
![]() ![]() ![]() Manuel Córdova en el Couloir Swan al Pico Astazú en Gavarnie. Foto: desnivelpress.com |
El domingo 22 de abril el equipo de Jóvenes Alpinistas llegaba a Grindelwald como primera parada de su concentración, Simón Elías había pensado un inicio cañero: escalar la norte del Eiger por su vía clásica, algo que ninguno de los componentes del Equipo (ni si quiera el propio Elías) había hecho anteriormente. Pero no lo iban a hacer de cualquier manera, el objetivo era hacerlo de un tirón, sin vivaquear. Recorrer los más de 2.500 metros de recorrido y 1.800 metros de desnivel, rápido y seguido.
Como las condiciones eran buenas, aunque no tanto como en días anteriores, y el tiempo era estable, el equipo decidió llevar a cabo el plan. Finalmente, se repartieron en dos estrategias distintas, una primera formada por Aitor Abendaño, Sidarta Gallego y Míriam Marco, salía el mismo domingo 22 abril, con el objetivo de hacer la ascensión con un vivac.
Otra, lo hacía a las 4 de la mañana del lunes 23 formada por dos cordadas más, que atacaba la cara norte con la intención del non stop. La primera de ellas formada por Javi Bueno y Simón Elías; la segunda, por Jonatan Larrañaga y Manu Córdova.
![]() ![]() ![]() Miriam Marco escalando sobre hielo en la Cascada del Movison Gran en el Macizo de Cotiella. Foto: desnivelpress.com |
En los largos de la rampa alcanzaban a la cordada formada por Aitor y Sidarta, después que Míriam decidiera dar la vuelta tras 500 metros de ascensión aprovechando la salida de ventilación del túnel del tren cremallera, cerca del comienzo de la fisura difícil. A las 7,30 de la tarde Javi Bueno y Simón Elías alcanzaban la cumbre, poco después lo hacían Jonatan y Manu. Quedaban atrás 15 horas de intensa actividad y esfuerzo escalando la inmensa cara norte con destreza y potencia.
Parece que este Equipo está dispuesto a sorprendernos en cada una de sus concentraciones, y es que no sólo es destacadísima la actividad en sí, sino que también hay que valorar la valentía y modernidad del planteamiento del Equipo delante del objetivo alpinístico.
Pero la cosa no acaba aquí, si el tiempo y las condiciones se lo permiten, se dirigen hacia el espolón central de las Grandes Jorasses, en el Macizo del Montblanc, otra joya del Alpinismo clásico de dificultad y para finalizar, el próximo fin de semana la participación en el Trofeo Mezzalama de esquí de montaña, ¡casi nada!
Fuente: Simón Elías