Primera cumbre Ecuatoriana al Fitz Roy
Este es el reporte que nos envió Daniel Carrión, líder de la expedición conformada también por José Cobo y Nicolás Navarrete, quienes al lograr la cima del Fitz Roy se convierten en los primeros ecuatorianos en hacer esta cumbre:
Ruta seguida por la expedición ecuatoriana. Foto: D. Carrión
"El día sábado 5 de febrero, salimos de Chaltén; destino: la cumbre del Fitz Roy (ruta Franco Argentina). Este sería nuestro segundo intento.
En el primer intento logramos llegar a la Silla de los Franceses (350 metros de escalada mixta), siete largos, de entre 50 y 85 grados de inclinación, quisimos continuar pero no pudimos porque en los días pasados nevó mucho y las fisuras estaban llenas de nieve y hielo, lo que dificulta una progresión rápida y se pierde mucho tiempo en limpiar la nieve y el hielo de las fisuras, por lo que decidimos regresar y esperar otra ventana de buen clima.
En nuestro segundo intento subimos con mucha más confianza, más comida y energía; pasamos varios días caminando, escalando, comiendo y descansando alrededor de Chaltén (450 msnm); Chaltén es conocido como la capital del trekking en Argentina, es un pueblo muy tranquilo y lleno de turistas, de aquí salen caminando todos los escaladores que quieren ascender una de las tantas agujas.
Después de 8 horas caminando llegamos a Paso Superior que posee una altura de 2,000 msnm. Comimos y descansamos porque en cuestión de pocas horas estaríamos atacando la cumbre del Fitz.
Salimos a las 3:30 am. del domingo, llegamos a las 5:00 am. a la base de la pared, donde encontramos la nieve muy suave, hundiéndonos por encima de las rodillas. Casi decidimos abandonar, pensamos que si aquí en la base de la pared estaba así, arriba iba a estar peor y con peligro de avalanchas; tomamos un té y esperamos hasta que aparecieron los primeros rayos de luz.
Chequeamos los primeros metros de la ruta, las condiciones estaban perfectas y escalamos por segunda ocasión la Brecha de los Italianos, esta vez lo hicimos mucho más rápido, con más confianza y alegría. Éste podría ser nuestro día de suerte, después de 5 horas de escalada llegamos a la Silla de los Italianos y nos encontramos con un viento muy fuerte que nos impedía continuar, así que esperamos a que el viento calmara. Pasaron las horas y el viento no calmó y decidimos vivaquear en la Silla.
José Cobo (d) y Nico Navarrete (i) en "La Brecha". Foto: D. Carrión
Comimos y descansamos toda la noche, amaneció el día lunes, el viento nunca dejó de soplar, era temprano y continuamos, Nico intentó llegar a la roca por una arista de nieve y hielo 45-55 grados de inclinación pero cuando ya estaba a unos 20 metros de la pared el viento comenzó a soplar más fuerte, así es que regresamos de nuevo al campamento base, pues no queríamos exponernos más.
Llegamos a Paso Superior un poco desanimados y empezamos a empacar nuestras cuatro cosas para regresar a Chaltén, pero justo unos diez minutos antes de empezar el regreso, comienzan a llegar más escaladores que nos cuentan que el clima se viene bueno para los próximos tres días.
Entre Nico, José y Yo (Daniel) discutimos cual sería la mejor decisión, porque ya no teníamos mucha comida, estamos desanimados; ya eran dos veces que la pared nos decía que no. Pensamos otras opciones para escalar pero al final continuamos con nuestro objetivo, llegar a la cumbre del Fitz.
Teníamos un día y medio para descansar y tratar de recuperar energía y ánimo. Mientras más se acercaba el momento empezó a llegar más gente que iba a intentar subir el Fitz por la misma ruta (Franco Argentina), y decidimos empezar temprano antes que todos.
Comenzamos la caminata de aproximación a la base de la pared a las diez y media de la noche del día martes, antes que el resto de cordadas, asegurando que nadie delante de nosotros nos bote material.
Llegamos a la base de la pared a la 1:00 am. con una hora de retraso, el glaciar había cambiado mucho con estos días de sol, el primer largo de hielo que tenía una pared de 3 metros ahora era de 5 metros y mucha agua bajaba por la pared. Aunque había cambiado mucho pasamos los largos de la Brecha sin mucha dificultad, era la tercera vez que la subíamos. Mucha nieve había desaparecido y nos encontramos con muchas rocas sueltas, pero sin ningún contratiempo llegamos en 4 horas a la Silla.
Con los primeros rayos de sol empezamos a escalar nuestro primer largo de roca, una fisura perfecta de dedos de 30 metros, las condiciones eran perfectas, la roca estaba limpia, seca y el viento soplaba lo justo para que nosotros escalemos sin problemas.
Daniel Carrión en "la Silla", con el C. Torre a su espalda. Foto: D. Carrión
Son trece largos de roca (650 metros) que terminamos de escalar aproximadamente a las 8 de la noche, tuvimos uno que otro contratiempo pero ninguno que nos desanime, en ese momento nos faltaba tan solo 150 metros de altura de la cumbre, esta parte es más rápida aunque son seis largos de hielo duro de 45 grados de inclinación donde hay que tener mucho cuidado, aquí nos cambiamos los pies de gato por las botas y crampones.
En este momento ya no fuimos muy rápido por que perdimos los crampones de José, y sin perder mucho el ritmo llegamos a la cumbre a las 9:40 pm con las últimas luces del sol. No lo podíamos creer, hicimos la cumbre del Fitz Roy (3,405 msnm) gritando como locos y una que otra lágrima que se nos escapó!!. Nuestro sueño de escalar el Fitz se hizo realidad, pero la alegría y tranquilidad no era completa porque solo la mitad del camino estaba hecho; ahora nos tocaba bajar, la noche y el viento estaban con nosotros y la bajada es lo más peligroso. José no tenía sus crampones, haciendo más peligrosa la bajada. Los rapeles nos tomaron doce horas, más una hora en llegar al campamento.
Fueron 6 días en total en Paso Superior y 48 horas sin parar para subir el Fitz y bajar a Chaltén, estamos muy cansados pero muy felices de haber hecho cumbre en el Fitz Roy."
Daniel, Nico y José en la cumbre del Fitz Roy (3,405 msnm)
Felicitaciones de parte de todos los que hacemos Tatoo a este trío de aguerridos y excelentes escaladores ecuatorianos, quienes con esta cumbre logran de alguna manera, además, reinvindicar el esfuerzo realizado en las expediciones ecuatorianas anteriores de los Hermanos Dammer y del equipo "Somos Ecuador", liderado por nuestro entrañable amigo Iván Vallejo.
