Las mejores expediciones del 2012
La apertura de la arista Mazeno del Nanga Parbat y la primera invernal del Gasherbrum I fueron las noticias más destacadas en los ochomiles, donde Òscar Cadiach realizó el triplete con el Annapurna, Dhaulagiri y K2. Masificación, tragedias y la alternativa en seismiles y sietemiles fueron otros temas preferentes.
Las noticias de expediciones siguen teniendo en los ochomiles sus montañas predilectas. Una serie de alpinistas recalcitrantes continúa empeñándose en demostrar que todavía quedan actividades interesantes por realizar en los picos más altos del planeta. La apertura de nuevas rutas y el ochomilismo invernal en Pakistán han sido las dos tendencias que han mantenido la esencia del alpinismo a más de 8.000 metros.
La nueva ruta más celebrada fue la enorme odisea de 18 días llevada a cabo por Rick Allen y Sandy Allan durante el verano en el Nanga Parbat, que culminó en la cumbre después de haber recorrido la arista Mazeno. Era una de las cuentas pendientes del himalayismo de primer nivel y resultó ser una aventura impresionante completada por los dos británicos.
Ochomilismo invernal
En cuanto a los desafíos invernales pendientes en Pakistán, el año 2012 vio cómo los polacos Adam Bielecki y Janusz Gołąb conseguían la primera invernal del Gasherbrum 1. Una ascensión que quedó empañada por la desaparición de Gerfried Göschl, Cedric Hählen y Nissar Hussain mientras intentaban conseguir el mismo objetivo por la otra vertiente de la montaña, integrados en una expedición en la que también participaron Álex Txikon y Carlos Suárez.
El Nanga Parbat y el K2 también recibieron otras expediciones que pretendían la primera invernal de ambas montañas, aunque sin éxito. De hecho, mientras los dos equipos del Nanga Parbat (el de Simone Moro y Denis Urubko y otra expedición polaca) se retiraban ante las condiciones de la montaña, la tragedia también afectaba a los rusos del K2, que cedieron ante el fallecimiento de Vitaly Gorelik por congelaciones.
Masificación y drama en el Manaslu
Un tema recurrente durante todo el año cuando se ha hablado de los ochomiles ha sido la masificación que han experimentado las montañas, especialmente grave en el caso del Everest en primavera. Una masificación que convertía en más arriesgadas las condiciones de la montaña, que ya habían hecho que una de las agencias más importantes, con el experimentado Russell Brice a la cabeza, retirara todos sus efectivos del campo base a principios de mayo.
Lo mejor del alpinismo de 2012
Algunos escaladores, como Simone Moro o Ferran Latorre eran testigos y parte perjudicada de esta cuestión, al no tener posibilidades de ascender sin oxígeno por las rutas normales como era su objetivo ante la acumulación de personas con oxígeno en las cuerdas fijas y los consiguientes retrasos. La temporada 2012 del Everest se cerró con una cifra acumulada de más de 6.000 personas en el techo del mundo, 565 durante la primavera de este año.
A pesar de algunos fallecimientos, la temida tragedia masiva no se produjo en el Everest sino en el Manaslu, la montaña a la que numerosas expediciones comerciales acudieron cuando las autoridades chinas cerraron el Cho Oyu. Allí, una gigantesca avalancha barría los C2 y C3 provocando que un total de once alpinistas perdieran la vida, entre ellos un español. Una semana después de la avalancha, numerosos montañeros alcanzaron la cima del Manaslu, y Benedikt Böhm –uno de los destacados durante la operación de rescate de los afectados- conseguía alcanzar la cumbre y realizar el descenso en esquís en menos de 24 horas.
Lo mejor de la escalada en hielo de 2012
Òscar Cadiach ha sido el alpinista español más destacado en los ochomiles este año, completando un triplete destacable tras hacerse con las cumbres del Annapurna y el Dhaulagiri en primavera y del K2 en verano. Con ellas, encarrila su objetivo de convertirse en el primer catalán con los catorce ochomiles y tiene ya once en su haber. Un objetivo que también pretende Ferran Latorre, que este año ha sumado el Gasherbrum 2 y ya lleva siete.
También vale la pena reseñar la carrera de Carlos Soria, que tiene la idea de completar los Catorce de más edad de la historia. A sus 73 años, este año ha realizado sendas expediciones al Annapurna y al Dhaulagiri, aunque sin cumbre. También sin cumbre se quedaron Juanito Oiarzabal, Carlos Pauner y Juanjo Garra en el Shisha Pangma tras haberse confundido durante la noche y haberse quedado a 50 metros de la cima.
Lo mejor de la escalada en pared de 2012
Ante las críticas de muchos sectores del alpinismo moderno sobre lo manoseado de los ochomiles y sus rutas normales, el foco de atención de una nueva hornada de alpinistas ansiosos de terreno de aventura y nuevas actividades se ha centrado en montañas algo menos elevadas pero poco o nada frecuentadas y con un mayor compromiso técnico. Seguramente quienes mejor han encarnado dicho ejemplo han sido los franceses del GMHM, que en enero completó la travesía integral de la Cordillera Darwin (Tierra del Fuego), en junio abrió una nueva ruta en el Latok II (7.108 m, Pakistán) y en octubre se hacía con la primera de la cara oeste del Kamet (7.756 m, Himalaya indio).
Otros que no les andan a la zaga son los estadounidenses Kyle Dempster y Hayden Kennedy que, después de ser protagonistas en Patagonia con su ascensión de la vía del Compresor del Cerro Torre y posterior retirada de los clavos de Maestri, viajaron a Pakistán para abrir sendas vías en las paredes vírgenes de la cara este del K7 (6.935 m) con el esloveno Urban Novak y de la cara sur del Ogro.
Lo mejor de la escalada deportiva de 2012
Hay un puñado de actividades que vale la pena tener en cuenta, en esta misma tendencia. La primera línea en la cara noreste de la Muztagh Tower (7.284 m) por parte de los rusos Dmitry Golovchenko, Alexander Lange y Sergey Nilov tras 17 días en la pared. La liberación de Fior di vite (800 m, 90º, M5, 7a) en la cara norte de la Arwa Spire (6.193 m) a cargo de Roger Schaeli y Simon Gietl. La apertura de Mick Fowler y Paul Ramsden de Prow of Shiva en el Shiva (6.142 m). La primera ascensión de la cara oeste del Janak (7.041 m) por los eslovenos Nejc Marcic y Luka Strazar, a través de Modri dirkač (1.400 m, M4, 80º). Y la primera japonesa del pilar sur del Kyashar (6.769 m), abriendo la ruta Nima line (ED+, 6a, M5, 2.200 m).
Fuente:
