Según los alpinistas, sin riesgo no se alcanzaría el autoconocimiento que se deriva de forzar la vida al límite. Para ellos, tal vez merezca la pena. No obstante, cuando se produce una tragedia, ¿qué sucede con los que quedan detrás? ¿Qué empuja a alguien a compartir su futuro con una persona que se juega la vida a grandes altitudes? ¿Cómo es la existencia a la sombra de la montaña? Estas preguntas han sido tabú durante mucho tiempo en el mundo de la montaña.

• Ahora, las esposas, los padres y los hijos de alpinistas de reconocido prestigio internacional rompen por fin su silencio y hablan sobre la faceta oscura de la aventura.
  
  Maria Coffey se vio ante uno de los tragos más amargos del alpinismo cuando su compañero Joe Tasker desapareció en la arista noreste del Everest en 1982. En Los zarpazos de la montaña, Coffey nos ofrece un retrato íntimo de la aventura y los conflictos de pasión, desolación y belleza que crea esa seductora obsesión. Mediante entrevistas con destacados alpinistas de todo el mundo, o con sus viudas y familias —Jim Wickwire, Conrad Anker, Lynn Hill, Joe Simpson, Chris Bonington, Ed Viesturs, Anatoli Bukreev, Alex Lowe y muchos otros— indaga en lo que empuja a hombres y mujeres a ofrecer sus vidas a las grandes montañas. Se pregunta por qué, a pesar de las innumerables tragedias, el mundo sigue alabando sus logros. Con conocimiento de causa, Coffey revela las consecuencias de amar a alguien que corre tales riesgos. Nos habla de los estimulantes momentos de euforia y de las inevitables depresiones; de la tensión de las largas separaciones o la constante amenaza del desconsuelo y de las vidas que quedan hechas añicos tras la estela de un accidente de montaña.
  
  Los zarpazos de la montaña es un libro profundo y electrizante que pone sobre el tapete los tremendos costes personales del alpinismo extremo. En 2003 fue galardonado con el Premio de Literatura de Montaña en el Festival de Montaña de Banff, en Canadá.